Libro: Memorias de un mexicano comunista. Mi testimonio, Valentin Campa.
Autor: Valentín Campa Salazar
Este es un libro acerca de las memorias y análsis del comunista mexicano Valentín Campa Salazar quien lucho por los derecho de la clase proletaria, ferrocarrilera, campesinos y maestros. Me gustó la objetividad del autor ya que nos cuenta desde su ojo analítico y con crítica constructiva. Creo que este ojo clínico y analítico de Valentin Campa no perdona a nadie:
1. La constitución de 1917 tenía un carácter democráticoburguesa (p. 74)
2. Diego Rivera mostró en diversas ocasiones actitudes reaccionarias y traidoras hacia el PCM (p. 97, p. 101)
3. Carranza era un ranchero terrateniente burgués (p.73)
4. Calles era admirador de Hitler (p.114)
5. Fidel Velázquez en los años 30 era un empleado de una pasteurizadora de leche con un sueldo de $1.50 diarios. Con su nefasta trayectoria dentro de la Federación de Sindicatos del Distrito Federal, lo posicionó como oligarca multimillonario. (p. 133)
6. Lázaro Cárdenas pusó como Jefe de Policía del DF al Gral Méndez quien había realizado un matanza de indígenas en Ochipen. Los indígenas exigían su derecho a controlar el municipio pero se les obligó a admitir a un ayuntamiento impuesto por el gobernador Correa.
7. Calles lanza un decreto funesto de prohibir la sindicalización (p. 260)
8. Cárdenas permitió que ciertas personas acumularan grandes capitales. Se comienza a conformar la gran burguesía mexicana (p. 261)
9. China apoyó al fascista Pinochet en Chile
10. La URSS apoyó al gobierno impuesto por la CIA en Cambodia.
Valentín Campa la pasó 13 años, 11 meses, 13 días de su vida en la cárcel. Siempre perseguido por policías y la CIA. El actuar de Campa fue incómodo para casi todos los presidentes de México porque señalaba con análisis y críticas la forma en como unos pocos amasaban fortunas. Esta persecución se dio desde la presidencia de Calles (1927) hasta la de Luis Echeverria (1971). El único sexenio en el que no estuvo en la cárcel fue cuando estuvo en la presidencia Lázaro Cárdenas. En muchas partes del libro Valentín Campa se autodenomina comunista científico.
El 24 de noviembre de 1919 se constituyó el Partido Comunista Mexicano. Fue el acuerdo de la asamblea nacional del Partido Socialista en el sentido de que éste se transformara en el Partido Comunista Mexicano (PCM) y se adhiriese a la III Internacional. Entre los factores que promovieron la constitución del PCM era el señalar que la Constitución de 1917 era de tendencia democrático burguesa consolidando la burguesía nacional. Otro de los factores fue la influencia de la revolución del 7 de noviembre de 1917 por el proletariado ruso.
El PCM y la Confederación Sindical Unica influyó en muchas huelgas petroleras anteriores a la nacionalización de la industria. Se planteaba la lucha por un contrato único para toda la industria, en el que se nivelaran los salarios y las prestaciones sobre la base de los más altos. Debido a la resistencia de compañías imperialistas el sindicato emplazó a huelga el 29 de mayo de 1937 participando quince mil obreros y empleados de la industria. Lázaro Cárdenas después de la nacionalización de ferrocarriles mexicanos titubeaba si debía nacionalizar el petróleo. Pero el empuje mayoritario progresista del país, en concreto del movimiento sindical y específicamente de los petroleros, decididos a llegar a la huelga general con objeto de obligar a las empresas a firmar contrato único, condujo a que Cárdenas a que pusiera que se sometieran las demandas del sindicato a revisión, y que en caso de no conceder las demandas justas de los petroleros, se plantearía la nacionalización. Así fue como el 18 de marzo de 1938, Cárdenas leyó el decreto en el que el gobierno, ante la actitud arrogante de las compañías pertroleras y después de haber hecho todo lo posible para evitar un paso como era el de la nacionalización, se veía obligado a recurrir a ella.
Otro hecho trascendente comentado por Campa en este libro es la rebelión en territorio mexicano que pretendían hacer Saturnino Cedillo y unos coroneles: un alemán, un japonés y un representante de los Rockefeller de la Standard Oil. Estas planeaciones se llevaron a cabo en Las Palomas, San Luis Potosí. Se analizó la situación y se llegó a la conclusión de evidenciar públicamente los planes de Cedillo. Se publicó en los diarios y también se hicieron mitines para informar al respecto y al final la rebelión fue aplastada pues los campesinos que habían sido armados comprendieron que esto quería desatar una guerra en México de forma entreguista.
Después de que Mexico declaro la guerra a los régimenes fascistas, los submarinos japoneses habían estado merodeando la península de BC. Con este motivo, el gobierno de EUA ejercía una gran presión para que le permitieran instalar bases en la citada península a fin de salvaguardarla de las incursiones y ataques japoneses. Ávila Camacho como presidente se oponía a ceder esas bases y designó como jefe de operaciones a Lázaro Cárdenas con resultados favorables.
El PCM y la Confederación Sindical Unica influyó en muchas huelgas petroleras anteriores a la nacionalización de la industria. Se planteaba la lucha por un contrato único para toda la industria, en el que se nivelaran los salarios y las prestaciones sobre la base de los más altos. Debido a la resistencia de compañías imperialistas el sindicato emplazó a huelga el 29 de mayo de 1937 participando quince mil obreros y empleados de la industria. Lázaro Cárdenas después de la nacionalización de ferrocarriles mexicanos titubeaba si debía nacionalizar el petróleo. Pero el empuje mayoritario progresista del país, en concreto del movimiento sindical y específicamente de los petroleros, decididos a llegar a la huelga general con objeto de obligar a las empresas a firmar contrato único, condujo a que Cárdenas a que pusiera que se sometieran las demandas del sindicato a revisión, y que en caso de no conceder las demandas justas de los petroleros, se plantearía la nacionalización. Así fue como el 18 de marzo de 1938, Cárdenas leyó el decreto en el que el gobierno, ante la actitud arrogante de las compañías pertroleras y después de haber hecho todo lo posible para evitar un paso como era el de la nacionalización, se veía obligado a recurrir a ella.
Otro hecho trascendente comentado por Campa en este libro es la rebelión en territorio mexicano que pretendían hacer Saturnino Cedillo y unos coroneles: un alemán, un japonés y un representante de los Rockefeller de la Standard Oil. Estas planeaciones se llevaron a cabo en Las Palomas, San Luis Potosí. Se analizó la situación y se llegó a la conclusión de evidenciar públicamente los planes de Cedillo. Se publicó en los diarios y también se hicieron mitines para informar al respecto y al final la rebelión fue aplastada pues los campesinos que habían sido armados comprendieron que esto quería desatar una guerra en México de forma entreguista.
Después de que Mexico declaro la guerra a los régimenes fascistas, los submarinos japoneses habían estado merodeando la península de BC. Con este motivo, el gobierno de EUA ejercía una gran presión para que le permitieran instalar bases en la citada península a fin de salvaguardarla de las incursiones y ataques japoneses. Ávila Camacho como presidente se oponía a ceder esas bases y designó como jefe de operaciones a Lázaro Cárdenas con resultados favorables.
Campa tenía pruebas de que South Pacific había cometido muchos fraudes hacia la nación y al Estado, por lo que en vez de indemnizarla, South Pacific debía una cantidad muy fuerte a nuestros país.
Campa fue expulsado del PCM porque no estuvo de acuerdo en apoyar el asesinato de Trotsky en México, ya que consideraba que eso no favorecería al PCM. Esa orden de asesinar a Trotsky venía desde Rusia por parte de Stalin.
En 1959 López Mateos se entrevistó con Eisenhower en Acapulco, donde EUA le concedía una serie de créditos y garantías monetarias al gobierno de México. Lo que no se informó es que López Mateos se comprometió entonces a reprimir el movimiento sindical independiente. El 28 de marzo de 1959 el Sindicato Ferrocarrilero fue asaltado por el ejército y se generalizó la represión.
Al respecto de la represión general de fines de marzo del 59 contra ferrocarrileros, Renato Leduc escribió un artículo en la revista Siempre! en el que entre otras cosas, decía que él había obtenido un dato de fuente muy autorizada en el sentido de que unas semanas antes de la represión había llegado a México, a disposición del gobierno federal, un experto de la CIA para asesorar a éste en la represión contra los ferrocarrileros. Era un perito en provocaciones y el rompimiento de huelgas. El nombre de este agente de la CIA era Dean Stephansky.
El movimiento estudiantil del 68 planteaba demandas democráticas constitucionales y colocaba en segundo lugar demandas específicas del estudiantado. Planteaba la derogación del Artículo 145 del Código Penal sobre los delitos de disolución social por su carácter fascista y violatorio de las normas de la Constitución de 1917. Este artículo fue incorporado en 1950 por Alemán. Gracias al gran movimiento estudiantil se modificó dicho código fascista y en un periodo extraordinario. Gracias a esto, Campa y otros compañeros pudieron ser libres de cárcel en junio de 1970.
El artículo 123 fracción XII decía que los trabajadores tenían derecho a casas cómodas. Luis Echeverría derogó la fracción XII sustituyendo con crédito INFONAVIT.
En 1975 Campa es candidato por el PCM. Las votaciones se cerraron con un millón seiscientos mil votos a favor de Campa y 16,703,801 votos a favor de López Portillo. Desde entonces ya existía las personas que no iban a votar por su desconfianza en las elecciones y esto también afectaba un aproximado de cuántos más simpatizantes tuvo Campa.
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