Padre amoroso, yo quiero perdonar a todos en mi vida incluyéndome a mí mismo, porque tú me has perdonado a mí. Gracias, Señor, por esta gracia.
Me perdono a mí mismo por todos mis pecados, faltas y fracasos, cuántas cosas inconclusas, cuántos malos momentos por no querer conocerte, todo lo pongo en tus manos.
Me perdono a mí mismo por no ser perfecto, me acepto a mí mismo. Libero todas las cosas que tengo contra mí, me libero a mí mismo de cualquier atadura y hago las paces conmigo mismo ahora, por el poder del Espíritu Santo.
Perdono a mis padres por cualquier negatividad y falta de amor que hayan tenido conmigo a través de mi vida, dándose cuenta de ello o sin darse cuenta, especialmente en mi niñez, los perdono por su falta de amor, por preferir a mi hermano. Por cualquier abuso de cualquier forma que hayan cometido conmigo, los perdono ahora. Si en alguna forma no me dieron una profunda y plena satisfacción paternal hoy los perdono. Yo los libero de cualquier atadura y les doy mi paz.
Perdono a mi esposo(a) por cualquier negatividad o falta de amor que me haya expresado a través del tiempo en que hemos estado juntos, especialmente por su falta de fidelidad, sus malos tratos, por su abandono, por todas las heridas en nuestra relación, yo lo perdono. Yo ahora libero a mi esposo(a) de cualquier atadura y le doy la paz entre nosotros ahora.
Perdono a mis hijos de cualquier herida, especialmente por no prestarme atención. Yo ahora los libero de cualquier atadura y les doy mi paz. Bendícelos Señor. Perdono a mis Hermanos y Hermanas por cualquier negatividad y falta de amor, por aquel consuelo que necesité y no me lo dieron, por aquella ayuda que tanto necesité y tampoco me dieron.
Perdono a mis familiares, a mis amigos, a mis vecinos, por cualquier daño que me hayan hecho, yo los libero en tu nombre Señor Jesús. Yo los libero de cualquier atadura y les doy a ellos mi bendición en el nombre de Jesús.
Yo perdono a todos aquellos que me hayan herido en cualquier forma, o que hayan dañado a mi familia.
Padre Celestial, ahora te pido la gracia de perdonar aquella persona que más me ha herido en la vida, Aquella que es la más difícil de perdonar, ahora elijo perdonarla aún cuando siento dolor y cólera contra ella.
Señor, si hay alguien más que necesito perdonar, tráelo a mi recuerdo. Gracias Padre amoroso, por dejarme libre.
Ahora digo una bendición para aquellos que me hirieron Señor haz algo especial para cada uno de ellos ahora, que en este momento reciban tu bendición.
Te alabo y te bendigo Señor, gracias por tu amor.
Amén.
Obtenida de: Un viaje a tu interior, página 145
No comments:
Post a Comment