Yo iba por la calle muy contenta cuando veo a uno de estos vendedores que se plantan en cualquier esquina presentando un maravilloso artefacto para sostener el cabello. La verdad me impresiono las cosas que hacia con este artefacto y terminé comprandolo por la cantidad de 10 pesos. Luego en casa al abrir la bolsita me encuentro con unos simples alambres plastificados con cinta de aislar en los extremos. La verdad me dio risa y a la vez me sentí un poco engañada. Así no se veían los que el estaba usando con su maniquí. Porque para eso llevaba un maniquí y le hacia muchos y diferentes peinados. El señor se veía un poco descuidado, pero ero demasiado bueno para hablar y mostrar las maravillas de su producto.
Pero lo que vendía no era más que un alambre unido con una cinta de aislar en uno de los extremos. Realmente funciona, pero al final de cuentas es solo un alambre. Por eso se me hizo que era un tanto cuanto visionario el vender este tipo de productos, me dio entre gusto y frustración. Me dio gusto porque parece que el vendedor al menos le echo un poco de imaginación para no gastar mucho y vender su producto pero también me sentí engañada porque cuando el hacia los peinados no me percate si estaba usando un simple alambre con cinta de aislar. Debo observar mejor la próxima vez.
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